lunes, 19 de diciembre de 2011

Un estuche para hacer tipografías
























Este estuche guarda en su interior un número infinito de tipografías. Tantas como las combinaciones que se pueden hacer con 30 sellos magnéticos modulares. Lo diseñó Blastto con la certeza de que “no inventaba nada nuevo” pero con la intención de “aportar algo más y mejorar los proyectos de estampación tipográfica”.
Dice el diseñador que los sistemas de estampación utilizan siempre los mismos tipos de letras y no dejan crear más de una tipografía. Try Type, en cambio, permite que se unan dos, cuatro, seis u ocho sellos, de forma magnética, para crear distintas tipografías.
“Es mi proyecto de fin de estudios”, especifica el diseñador. “Quería hacer un sistema de estampación tipográfica que pudiera crear más de una tipografía. Estuve mirando sellos y pensé hacer algo mejor que lo que había encontrado. Intenté hacer algo más creativo y se me ocurrió hacer un estuche lleno de módulos combinables para que cada persona pudiera hacer distintas tipografías”.
Try Type es, según Llorente, un prototipo “basado en tipografía modular, creada a través de la unión de diferentes bloques que se combinan entre sí, y el sistema de impresión por tipos móviles que se usaba en las imprentas antes de que existieran los medios digitales”.
Llorente investigó sobre la construcción más básica de cada letra y su sintaxis visual, y llegó a esta clasificación en función de sus formas geométricas.
El diseñador desarrolló diferentes módulos partiendo de las formas básicas. El cuadrado, el círculo y el triángulo.
Hizo 30 sellos de madera que pueden unirse mediante un sistema magnético y girar para formar combinaciones diferentes.
De la combinación de estos sellos se pueden obtener cientos de tipografías…
El estuche contiene 30 módulos, un tampón de tinta, un manual de instrucciones, una libreta donde guardar y estampar las tipografías.

jueves, 24 de noviembre de 2011

McDnlds se reinventa en Francia













Fast-food giant McDonalds have commissioned designer Patrick Norguet to redesign their restaurant interiors across France.
While the chain has come to appeal primarily to teenagers, Norguet wants to rebrand it as a place for families.
The space is divided by plywood cabinets, shelving and booths, and furnished with his own Still metal chair for Lapalma.
Customers can order at the counter or from digital terminals in family booths.
The neutral pallette is highlighted with orange and yellow metal storage boxes, plus red and dark green upholstery.
Other designer updates to fast-food restaurants include a Little Chef outlet by Ab Rogers and a chicken shop in Munich by Ippolito Fleitz Group.
Here are some more details from Patrick Norguet:
New interior design for McDonald’s restaurants in France by Patrick Norguet
Mc Donald’s has put Patrick Norguet in charge of designing the new architectural identity for its restaurants in France. A project which is exciting in terms of its scope as well as in its technical and sociological constraints since it concerned McDonald’s returning to its founding myth: familial fast food. If the brand was originally founded on the family, its image has little by little slid towards a more urban and adolescent tone. A return therefore to McDo’s DNA with this new interior design that Patrick Norguet, literally and figuratively, matches with getting back to roots.
The plant metaphor, with its branching development, this root common to the brand and to the family, is transformed here into an architecture which is transversal and expansive: birch plywood takes root and branches out in the restaurant in order to create areas, functions and moods for different social requirements without compartmentalising.
This organic and functional furniture/architecture offers several possibilities, several eating choices from eating standing up for lone teenagers, alcoves providing privacy to family table service, a small revolution at Mc Donald’s with digital control terminals integrated into the base and distributed throughout the restaurant. Henceforth, a mother can settle with her offspring at a table, order from a nearby terminal and wait for the meals to be brought to the table.
Patrick Norguet’s design, which as always hits the spot, uses contemporary white which he counterbalances with fun colours without falling for “toy” conventions like for example the storage elements with the painted metal boxes included in the base template. The luminous ambiance and the quality of the acoustics are exceptionally meticulous and offer customers a comfort which is rare today, whilst the quest for a certain radical nature is revealed through the choice of materials (plywood, sheet metal, concrete, etc.), tested in conditions of heavy passage to respond to the constraints of such a popular restaurant.
The designer is using his “Still” metal chair for Lapalma for the seats with a new high stool version specially designed for the occasion. The ceramic floor also designed by Patrick Norguet for Lea Ceramica immediately lends a distinctive tone to the venue. These huge, ultra-slim 2 metre slabs break with usual visual conventions: warm and graphic without being carpet, they change our habits in terms of flooring to create a brand new typology.
Piloted at the start of the year in the Villefranche-de-Lauragais restaurant 40 km from Toulouse, the concept was immediately appealing and spoke volumes. 6 restaurants are currently in the pipeline throughout France.

jueves, 17 de noviembre de 2011

GREEN BOTTLE






La huella de carbono de una botella de plástico también es mucho mayor que la de papel. Esta última puede reciclarse hasta 7 veces mientras que la primera solo puede pasar una vez por la planta de reciclaje. Una vez inservible, o en caso de no ser reciclado, el papel se descompone en la naturaleza. El plástico, fuera de la planta de tratamientos de residuos, va a la sopa.

El precio de producción de una botella de papel es idéntico al de una botella de plástico. La maquinaria actual produce 50 envases al minuto y, por el momento, se fabrican en Turquía aunque el fundador de la compañía dijo a The Guardian que planea abrir una planta en Cornwall y, además, pretende producir una nueva generación de botellas de papel para compañías de detergentes o champú.

Para el fundador de la compañía, el éxito de GreenBottle es “una lección para el Reino Unido”, según dice en un comunicado. “A pesar de la depresión económica, estamos mostrando que es perfectamente posible triunfar si eres una compañía pequeña con una gran idea, una tecnología mejor y si estás preparado para salir y hablar con los inversores adecuados. Nosotros no hemos tenido apoyo de ningún banco pero eso no nos ha impedido seguir adelante. Si la idea es lo suficientemente potente, encontrarás la inversión seguro en alguna parte”.

GreenBottle asegura que el Reino Unido ve cada día 15 millones de botellas de plástico que acaban en la basura. Una cifra que, al cabo del año, se acaba convirtiendo en 275.000 toneladas de plástico, según la BBC. Por cada hogar pasan una media de 500 botellas de plástico al año y de ellas solo 130 se reciclan. En Europa, solo el 2,5% de los envases de plástico se reciclan, según GreenBottle. El resto, las que no pasan por las plantas de reciclaje, tardarán hasta cinco siglos en descomponerse.

¿Por que nos cuesta tanto generar ideas?

Es una obviedad decir que todos necesitamos ideas para resolver nuestros problemas cotidianos o profesionales. Ideas brillantes, ideas rompedoras, ideas que nunca antes nadie había imaginado. Pero la verdad es que en estos tiempos en los que los cambios se suceden de manera exponencial, resolver problemas de forma creativa cada vez puede resultar más complicado.
La actitud juega un papel muy importante. La mayoría de las veces, es la responsable de que cuando nos ponemos a pensar, no suceda nada. “Todo está inventado”, “yo no soy creativo”, “eso no va a funcionar”, son pensamientos que inundan nuestra cabeza y sin darnos cuenta van durmiendo nuestro cerebro, que por naturaleza es vago y cómodo.
Por tanto, el rechazo a la novedad es algo inevitable desde el punto de vista científico. Tenemos que entrenarnos para ser capaces de que algo dentro de nosotros haga ‘clic’ y entendamos que, para crear nuevas alternativas, primero hay que romper con todas las creencias auto-limitantes que tenemos cada uno de nosotros, que indirectamente influyen en nuestra actitud. Empezar pensando que ‘todo es posible’ puede ser un buen punto de partida.
El proceso, por otro lado, es fundamental cuando queremos generar ideas. Como es comúnmente conocido, el hemisferio derecho del cerebro se encarga de la creatividad, mientras que el izquierdo se rige por las leyes de la lógica. El pensamiento lógico es hipotético y deductivo y, tal y como apunta Eduard De Bono, tiene una gran limitación de posibilidades cuando el objetivo es buscar soluciones a problemas nuevos que necesitan de otros enfoques.
Sin embargo, aunque sea el pensamiento creativo el más difícil de adquirir por falta únicamente de entrenamiento —como se ha venido demostrando—, para que una idea tenga éxito son necesarias las dos mitades del cerebro. Buscar el equilibrio es lo que realmente resulta complicado.
Las ideas se generan en función de lo que sabemos y lo que hemos aprendido, pero es importante tener la capacidad de evitar lo obvio y lo lógico de manera intencionada y dar paso a ese ‘todo es posible’ del que hablábamos antes.

¿Qué tal si empezamos con unos consejos básicos del experto R. Epstein?

• Anótalo todo. Las ideas no siempre surgen cuando las necesitas, por eso es importante contar con una libreta para ir apuntando cualquier cosa que se te ocurra, por absurda que parezca. Esa tontería puede ser la palanca que genere una gran idea.

• No tengas miedo. Enfrentarse a nuevos problemas es muy enriquecedor, aunque parezcan imposibles de solucionar. Desafía a tu cerebro a abandonar lo conocido por lo incierto, te darás cuenta cómo poco a poco van surgiendo nuevos pensamientos.

• Conviértete en una esponja. Cuanta más información y más plural mejor. Observa y absorbe todo lo que consideres que puede resultarte inspirador. No busques cerca, en tu sector, explora nuevos caminos, otras industrias.

• Mira bien dónde y con quién. El entorno es más importante de lo que crees, tanto físico como social. Rodéate de cosas y personas interesantes, son vitaminas para las ideas.

Carmen Bustos. Socia fundadora de Soulsight.